Playa Santiago
Playa Santiago es un pequeño pueblo de pescadores en la costa sur de La Gomera, que se ha convertido gradualmente en un atractivo lugar turístico que mantiene su autenticidad, entre restaurantes, pequeñas tiendas y bares junto a la playa, la vida cotidiana del pueblo sigue su curso. Los pescadores regresan al puerto después de una larga noche de pesca, los ancianos se reúnen para su juego diario de dominó en la plaza del pueblo.
El pueblo se abrió al turismo en los años 80, cuando la familia Olsen construyó el hermoso Hotel Jardín Tecina con vistas al Atlántico, el Hotel ofrece una gran variedad de servicios, restaurantes, cursos de tenis y pádel.
En las laderas de Tecina, justo encima del pueblo, se encuentra el campo de golf de Tecina, único en su abrumadora vista al mar y al Teide. Muchos visitantes se enamoran del ambiente encantador, ingenuo y sencillo del pueblo y vuelven cada año. Los locales son muy amigables y abiertos y hay una maravillosa sensación de ser parte de una comunidad. Como una gran familia.
En la costa sur de La Gomera, en el corazón del municipio rural de Alajero, se encuentra el pintoresco pueblo pesquero de Playa Santiago, donde al amanecer presencia la pequeña flota de barcos de pesca azul, regresando de su trabajo nocturno para desembarcar sus capturas en el puerto.
Alajero
Ubicado en la ladera sur de la isla, Alajero es como un balcón con vista al Atlántico. El pueblo está decorado con palmeras canarias silvestres y almendros, y los aldeanos todavía viven una vida tradicional cultivando sus propios vegetales, criando cabras y pollos, preparando su propio queso y vino.
Aunque la vieja generación vive muy feliz en Alajero, el pueblo tiene un espíritu joven, muchas familias jóvenes viven en Alajero, incluso hay una pequeña escuela primaria. Hay un restaurante muy bueno en Alajero: “Mesón de Clemente”, sin duda, el mejor restaurante para los amantes de la carne. ofreciendo una muestra de Venezuela.
Los propietarios de este restaurante, como muchos otros en los años 60, emigraron de las islas Canarias a América del Sur, principalmente a Venezuela y Cuba en busca de una vida mejor. Muchos de ellos regresaron a las Islas Canarias trayendo consigo muchos de los gustos, música y tradiciones.